Es un artefacto que monitoriza el avance del terreno y lo relaciona con variables meteorológicas.
El fisurómetro consta de tres sensores: uno de giro de una bobina de hilo que mide el desplazamiento, otro de temperatura y humedad del suelo y un tercero que mide la lluvia que cae sobre el fisurómetro.
Los datos los envía a una base de datos accesible desde una página web.